viernes, 19 de diciembre de 2008

Solución con alas

He encontrado la solución perfecta a mis necesidades de libertad, desplazamiento, compromiso con el medio ambiente y comodidad. No quiero tener carro, no quiero una moto, adoro mi bicicleta: tendré una motocleta, ya he visto varias en las calles de Lima y sus conductores sostienen una estúpida sonrisa: yo quiero esa sonrisa. Venceré mi miedo secreto a los atropellos y compraré otra bici para adaptarla. Quiero que mi bici de siempre siga siendo para hacer deporte. Me gustaría que la nueva fuese igual a la de la foto, azul, vintage, pero ese modelo no es para ciudad, es para manejar en la arena (aunque acá hay tiendas que mienten: "son para ciudad"). ¿Le podré instalar suspensiones o el motor anula eso? Digo, con los baches, los rompemuelles y todas las rampas naturales que hay en mi ciudad. Pero no importa. Ya sabré manejarlo.
Esta es la dirección que vende en Lima los motores para adaptar las bicicletas a su nueva libertad: http://www.motokleta.com/

3 comentarios:

LuchinG dijo...

Y es sumamente económico. Si ya tienes una bicileta, ponerle el motor te cuesta S/650, si lo divides entre 2 (dos soles de pasajes al día) sale que en 325 días útiles has recuperado el dinero, que es como un año y 3 meses. El costo del combustible es mínimo, rinde 400 km por galón. Si no fuera yo tan torpe para maneja, me compraría una.

Cael dijo...

No entiendo el fin de esas cosas. A 45km puedes matar a alguien, también consume gasolina, hace demasiado ruido(es una forma de contaminar) y por la velocidad tendrás que estar siempre en la pista y a la derecha lo que significa COMBIS. ¿Acaso no es mejor seguir pensando en bicicleta como sinónimo de actividad física, paseo y distraccón?

LuchinG dijo...

Cael: De mi casa al trabajo hay siete kilómetros. En combi (entre que salgo de mi casa, llego al paradero, el micro pasa, me bajo en el paradero que está cerca de mi trabajo y paso por la puerta de entrada) me tardo cuarenta minutos en llegar. En bicicleta me tardo lo mismo, yendo por vias paralelas a Aviación y Javier Prado, pero luego tendría que ducharme otra vez. En cambio, en una bicimoto llegaría, a una velocidad de 25 km/h (es decir, su velocidad máxima), en menos de veinte minutos. Adémás, la contaminación es mínima, comparada con la de un bus. Ese ratio de 400km por galón es simplemente alucinante, y se debe, supongo, a que el motor es simplísimo, para que funcione tienes que pedalear. Repito: si no fuera porque a cada rato me ando cayendo en la bicicleta, lo haría.